martes, 2 de septiembre de 2008

El día 9 despego hacia un nuevo hogar...







Efectivamente, aunque todo el mundo sabe que no soy precisamente una ave migratoria y que mis costumbres son más bien hogareñas (salvo cuando me da el momento loco), el día 9 volaré hacia tierras más cálidas para tomar posesión de un nuevo, aunque todavía no definitivo, hogar. Obviamente no volaré hacia allí con mis propias alas, eso sería un agravio para mis congéneres emplumados puesto que todo el mundo sabe que las alas de un avestruz no están diseñadas para alcanzar la velocidad de crucero ni ninguna otra velocidad, sino que su misión en la vida es reposar tranquilamente sobre un lecho de plumas esperando el momento de ser agitadas con violencia en un momento de ira pasajera o de necesidad gesticulatoria. Resuelta esta posible duda sobre el medio de transporte, tengo que confirmar lo que muchos ya me han preguntado, en tono preocupado y angustioso, por medio de SMS, mails y otros medios que ahora no vienen al caso: Sí, voy en avión. Aunque no con Spanair...
Ciertamente, la situación por la que traviesa nuestro país en la actualidad nos deja en un estado de preocupación tal que podría evolucionar hacia la patología, puesto que los desafortunados sucesos de éstos últimos días han dejado muy mal sabor de boca, en mi caso de pico, a todos aquellos que tienen previsto subir a un avión próximamente o que lo cogen habitualmente por diversos motivos. No es para menos, hablamos de vidas humanas que podrían perecer bajo las consecuencias de un simple despiste o fallo no previsto, y eso es terrible. En mi caso, el hecho de subir a un avión el día 9 me suscita cierta reflexión existencial a pesar de que mi vuelo, como ya he manifestado, no sea de Spanair....
No puedo, por ejemplo, evitar pensar en la muerte, enemiga siempre acechante... ni evitar, al pensar en ella, que me asalten aquél tipo de dudas eternas que llevan a sus espaldas hondas preguntas filosóficas del estilo "¿Hay vida después de la muerte?", "¿Existe Dios?", ¿"acechante" se escribe con hache o sin ella? ... ¬¬
Esta última cuestión, en concreto, hace tiempo que me lleva de cabeza.

No, en serio, verdaderamente lo que ha pasado, y está pasando, es horrible, pero hay que ser prácticos y ceñirnos a los hechos que pueden ayudarnos porque no sacamos nada de ser fatalistas o trágicos. Los hechos son que cada año mueren millones de personas en las carreteras y no por eso dejamos de subirnos a un coche, además, la mayor parte de accidentes se producen en los hogares y no por eso la gente renuncia al suyo... es decir que podemos encontrar la muerte en cualquier parte porque llegar a ella no depende de nosotros, así que: ¿para qué preocuparse?

Je! espero que con esta breve reflexión haya quedado claro que los avestruces, aunque a veces escondamos la cabeza cuando tenemos miedo, para otras cosas solemos tener... huevos (?) XD, aunque bueno, reconozco que eso no tiene mucho mérito, es nuestra naturaleza.. ¬¬

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